Por Juan Tomás Valenzuela
Para Roberto Marchena,
portavoz del pejepalo,
no es esencial que Gonzalo
posea una lírica plena.
-Por ahí andan dando pena,
digamos que “intelectuales”,
dando discursos triviales
sobre prevaricación,
y entre ellos anda un león
que ya es poco lo que vale-
Así se expresó Marchena,
el director de DICOM,
refiriendo al León
que le pagaba la cena.
Yo sentí vergüenza ajena
al escuchar a este tío,
que no era más que un ruyío
cuando en el 96
Balaguer, les dió freeway
y se han vuelto unos gandíos.
El portavoz del gobierno
dijo para Diario Libre
que un Penco de este calibre,
para estos tiempos modernos,
es mejor que un hijuecuerno
con vocabulario fino,
que asociado con Quirino
y con Arturo del Tiempo,
nos trajeron contratiempos
con sus negocios ladinos.
El funcionario de marras
cree que aquí se necesita,
no al marído de Cuquita
“liso” como una alcaparra,
sino a un gerente con garras,
que soliviante la vaina.
que se ponga la polainas
y se lance al pavimento,
y que asegure el sustento
en lo que este lío se amaina.
Lo que pretende Medina
para el bien de la nación
es dejar a este guasón
que le aguante la oficina,
en lo que él se encamina
hacia un retorno exitoso,
si no encuentra un calabozo
que los ataje en el camino,
por culpa de este felino
o del otro carpetoso.
-La mejor de las virtudes
que nos presenta Gonzalo,
es que es mucho menos malo,
con tó y menos aptitudes,
que el que sale en el Bermúdez
en tó sus presentaciones.
Y aunque le sobran razones
para tildarlo de bruto,
este fue el que eligió el “puto”
lo demás… pá mi cojones!.
Juan de los Palotes
6 noviembre 2019